En 2001 el Consell de Col·legis de Metges de Catalunya creó la Fundación Galatea con el fin de promover la salud, el bienestar físico y mental, y la calidad de vida del colectivo médico, con la intención de ir incorporando más profesiones sanitarias: enseguida se incluyó a las enfermeras y más recientemente, a los veterinarios, farmacéuticos, odontólogos, psicólogos y trabajadores sociales con la finalidad última de garantizar mejor la salud de la población que atienden.
Estas profesiones tienen un fuerte compromiso social, con grandes presiones de todo tipo que pueden llegar a alterar su estado anímico y su equilibrio psicoemocional, pero paradójicamente no tienen bastante cuidado de su propia salud, tal como aconsejan hacer a sus pacientes.
Hace ya más de 20 años que damos atención a los profesionales de la salud con trastornos mentales y/o adictivos en Cataluña y al resto del Estado. Su punta de lanza fue el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIMM), posteriormente el Programa RETORN dirigido a los profesionales de enfermería enfermos y, más tarde, con la creación de la Fundación Galatea desde el Consell de Col·legis de Metges de Catalunya, se consolidaba todavía más el objetivo de velar por la salud y la calidad de vida de los profesionales de la salud, generalizando la creación de sus respectivos programas con el mismo objetivo.
Esta consolidación proviene de la constatación de toda una serie de factores, de diferente naturaleza, que pueden poner en cuestión no solo la salud de estos profesionales, sino también su praxis y, por lo tanto, la salud y el bienestar de la población a la que prestan atención.